Y aquí sigo...

Pensando en ti, extrañando conversar contigo a diario, pero, ¿qué más haré?, debo aceptar las cosas como son, aunque me duela, te extraño demasiado. Y sé que no te importo ya, porque nunca te importé, no sé porqué me empeciné tanto en querer conocerte en que se me peguen tus frases, todo de tí. Quiero hacer algo al respecto para ya no sentir nada, pero simplemente me está costando demasiado, y estos mensajes los redacto,  como si te estuviera escribiendo o como si los fueses a leer. Pero vamos, eso no pasará tampoco. Extraño todo de ti, me gustas demasiado, tal cual como eres. Y sé que quizás no eres la persona más bella del mundo, pero para mí lo eres, y eso me baste y me sobra. No necesito tener alguien demasiado hermoso en mí vida, porque yo tampoco lo soy.  Yo nunca me olvido de las veces que salimos, el tiempo que pasamos juntos, las conversaciones. Siempre recuerdo esa vez que me dijiste por Whatsapp que querías crearte un blog para escribir cosas en el, nunca lo vi, no sé si existió. Pero en fin. Aquí estoy como un mongólico redactando cosas por ti, y tú allá muy feliz y tranquilo de que ya no estoy en tú vida. Y la verdad es que siempre fue así. Mientras tú pretendías que íbamos a ser "mejores amigos", a mí me daba celos todo, hasta te besabas con otros estando yo presente, ¿y qué le voy a hacer?, aguantarme, porque tampoco puedo decir nada al respecto.

Solo quisiera que éste sentimiento se vaya de mí, pero no puedo y creo que me quedaré estancado así para siempre.  Porque la verdad, fuiste alguien importante en mí vida, aunque yo no lo fui para ti. Igualmente te amo, y sé que solo puede ser una obsesión, pero me cuesta demasiado dejarte ir de mí vida. No puedo, no sé cómo hacerlo, no soy fuerte para aceptar que no somos nada, ni nunca lo seremos. Me da tanta rabia estar así, porque sé que es mí culpa, y hasta mis amigos me lo dicen, ¿no hay personas?, y yo sigo aquí, creyendo que no hay, porque realmente no las hay. Odio tener una vida así, tan negativa y tan deprimente, pero por más de que trate de cambiarla, eso no va a pasar nunca. Y a veces las canción de Manuel Turizo me pega demasiado porque esa parte que dice "Y aquí estaré cada día esperándote, imaginándome tus besos, pero los desperdicias con él". Soy yo, ese soy yo, esperándote todo el tiempo.